El renacimiento de la Emperatriz Maliciosa del Linaje Militar
Autor: Qian Shan Cha Ke (千山 茶客)
Esta novela no me pertenece. Todos los personajes y tramas pertenecen al autor.
Shen Miao es la hija
legitima del linaje militar de la familia Shen, pura, amable, tranquila,
flexible y tontamente enamorada del príncipe Ding, al punto que se lanzó al
papel de esposa.
Después de
ayudarlo durante seis años, finalmente se convirtió en la madre del mundo
(emperatriz) y él en el emperador.
Ella lo
acompañó a luchar por el país, floreciendo su territorio, incluso se arriesgó a
ser un rehén en un país extranjero. Sin embargo, después de regresar cinco
años después, no había lugar para ella en el Palacio Interior.
La belleza
en los brazos de su esposo sonreía alegremente, "Hermana mayor, el país
está estabilizado, por lo que debes retirarte".
Su hija se
había encontrado con una muerte violenta y el Príncipe Heredero, su hijo, fue
depuesto. Ninguno de los miembros de la familia Shen, que se habían
sacrificado por el país, tuvo la suerte de escapar. En una dinastía, todo
se derrumbó: ¡su clan había perecido y ella necesitaba llorar por sus hijos!
Shen Miao
nunca pensó que su matrimonio, donde pasaban por pruebas y tribulaciones como
pareja y se ayudaban mutuamente, ¡era solo una broma teatral para él!
Él dijo:
"Al ver que has seguido a Zhen durante veinte años, Zhen te concederá un
cadáver intacto. Deberías estar agradecido por este gran acto de bondad
".
Bajo los
tres Chi de seda blanca, Shen Miao hizo un voto malicioso: ¡en el futuro, ella
tomará parte en el fin de cada uno!
Al
renacer, ella regresó a la época cuando tenía catorce años, donde la tragedia
aún no había ocurrido: su familia todavía estaba viva y ella seguía siendo la quinta
hija pura, amable, tranquila y dócil del linaje militar.
Sus
familiares habían estado ocultando sus corazones negros. Sus primos son
despiadados y maliciosos, su nueva madrastra es como un tigre que mira a su
presa, y el hombre de mala reputación quiere repetir los acontecimientos.
Su familia
debe estar protegida, la enorme deuda de sangre debe vengarse, la sede imperial
del país también debe ser parte del trofeo. En esta vida, ¡veamos quién
puede vencer a los demás!
Pero ese
pequeño marqués de la familia Xie, Xie Jing Xing, permaneció de pie a su lado y
orgullosamente dijo: "Es solo la miserable caída del poder imperial. Recuerda
esto, el mundo te pertenece. ¡Me perteneces!"
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